La desinformación y otros trastornos de la información son un gran desafío que hoy en día enfrentan los periodistas. Por ejemplo, las llamadas fake news no solo confunden a los ciudadanos y las ciudadanas, sino que ponen en juego la confianza en el trabajo periodístico. Los principales espacios donde la desinformación transita son las redes sociales.
En Ecuador existen 15,7 millones de cuentas de redes sociales, según el informe de Mentinno Consultores a octubre del año anterior. Esas cuentas son manejadas por niños, jóvenes y adultos pero muchos de ellos no tienen el conocimiento suficiente sobre cómo diferenciar entre datos contaminados y no contaminados antes de consumirlos o compartirlos.
Ante esta situación, a escala mundial se han hecho acuerdo para combatir la desinformación. En el caso de Ecuador, se ha optado por una lucha desde el humor y, específicamente, la construcción y la difusión de los memes informativos, como una puesta del Observatorio Interuniversitario de Medios Ecuatorianos (OIME). Y es que los memes constituyen elementos digitales, en texto, audio o imágenes, de propagación inmediata de contenidos; por esas razones se los debe aprovechar al máximo y tomar ventaja de su rapidez de difusión para combatir la desinformación.
El docente de la Universidad Técnica de Cotopaxi (UTC), Pablo Lomas Chacón, menciona que “un meme informativo tiene que poseer dos características esenciales: la primera es compartir información de un tema en específico y, la segunda ser divertido para que llame la atención y cumpla con la esencia de un meme”.
Es importante resaltar que todos los contenidos de carácter mediático pasan por un proceso de apropiación tecnológica de los individuos que los gestan y quienes los consumen. Al respecto, la docente de Universidad UTE y divulgadora científica, Sofía Cabrera, menciona que “hay que tener en cuenta que para que tú puedas entender un meme tienes que entender el contexto, porque si no entiendes el contexto, no entiendes el meme»; así se comparte una información por medio de este recurso innovador y que ha logrado tanta penetración en este mundo digital.
En la historia de la prensa ecuatoriana, el humor ha sido una de las características de los contenidos. Ahora se ha digitalizado, entre otros recursos, con los memes que han llegado para quedarse. El mirarlos como un recurso útil contra la información contaminada abre otros caminos como su adaptación a lenguas distintas al Castellano.
Desde la UTC, que es parte del OIME, se ha trabajado en la traducción al kichwua de cuatro consejos para elaborar memes informativos. De acuerdo con el último censo poblacional, las personas que se autoidentificaron como parte del grupo étnico de los kichwas están en 22 de las 24 provincias de Ecuador, según estadísticas oficiales; para ellos, en el escenario digital, los pasos para informar desde el humor están disponibles como recursos para el desarrollo adecuado de competencias digitales.
